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viernes, 6 de mayo de 2011

EL GRAN CANARIA MÁS SACRIFICADO DE LA HISTORIA DEFENDERÁ LA QUINTA PLAZA


Los amarillos derrotan al Power Valencia y tocan su techo en la clasificación de la Liga ACB

Por Juan Pedro Borrego
El Gran Canaria afrontará la última jornada de la fase regular de la Liga ACB con un reto: repetir sus mejores registros en la competición española. La quinta plaza y 21 victorias en el recorrido largo de la Liga son los objetivos que pueden volver a alcanzar tras ganar en un partido eléctrico al Power Electronics Valencia por 68-66. El duelo final entre Tomás Bellas y Omar Cook animó extraordinariamente un choque que ya tenía muchos ingredientes para ser vibrante. El juego muchas veces anárquico de dos equipos que pueden terminar viéndose las caras en la lucha por el título llevó a ambos contrincantes a una resolución in extremis en el que al final, el factor campo y el mayor aplomo mental de los amarillos terminaron por ser decisivos.

Los jugadores del Gran Canaria, felicitados por los
aficionados del Cdentro Insular. (ACB Photos)

LA MEJOR DEFENSA
Los números, como el algodón del anuncio, no engañan. El Gran Canaria que está a punto de terminar la fase regular de la Liga ACB es, por el momento, el mejor equipo en defensa que ha tenido la historia del club. Con 72,15 puntos encajados de promedio mejora la versión de la campaña 1998/1999 en la que se acabó con una media de 76,03. Y defensa, esa volvió a ser la clave de la victoria ante el PE Electronics en otra jornada en la que los referentes ofensivos del equipo de Pedro Martínez volvieron a estar por debajo de sus promedios habituales.
La felicitación entre López y Alvarado. Este último
está teniendo un gran protagonismo en el tramo
final de la Liga tras la lesión de Green. (ACB Photos)
Defensa, sacrificio, pundonor y, sobre todo, aplomo son las variables que se fortalecen al Gran Canaria cuando actúa como local. El público del Centro Insular de Deportes quiso disfrutar con honores de play off un partido que sirve de ensayo general para la segunda fase de la competición doméstica. La gente está completamente entregada y la integración con el equipo hace que no se tema la visita del segundo mejor equipo foráneo de la competición. Así, el Valencia, tercer clasificado de la ACB, se vio sorprendido desde el inicio por un Granca que explotaba al máximo sus virtudes para adquirir rentas de hasta once puntos (24-13) en el marcador.

NO FUE FÁCIL
Sin embargo, las cosas no iban a resultar tan fácil como se presumían en esos instantes. Pesic se hartaba de que sus jugadores se cogieran el codo en la mano que les tendía en la libertad de juego. Las arengas en el banquillo y hasta en el centro de la cancha si era preciso se sucedían hasta que en el tercer cuarto, el PE comprendió el mensaje y el partido se convirtió en un auténtico combate en el que las defensas se imponían una y otra vez a los pundonorosos ataques.
Carroll participa con su hija en el festejo de la importante
victoria. (ACB Photos)
Sólo el más perseverante obtendría su recompensa. El Granca en eso tiene un entrenamiento extra. Las horas de vuelo del equipo en condiciones de precariedad por las lesiones de Savané y Green han servido como acerado la musculatura, y templado la coordinación neuronal hasta tal punto que se reduce hasta la mínima expresión las diferencias de nivel que existen a título individual dentro de la cancha. Así, Alvarado hizo de Bellas con excelencias y Bellas hizo de Green (y en muchos momentos de Marcus Norris) para que el resto de compañeros se contagiaran de su trabajo.
Rey busca espacios bajo el aro valenciano.
(ACB Photos)
Y así fue como la diferencia de presupuesto se quedó en nada sobre la cancha. El Gran Canaria y el PE Valencia llegaron al último minuto con todo por decidir (66-65), al público hasta la coronilla con un ‘trushtalker’ Omar Cook y al conjunto local sufriendo tanto en sus tiros libres como en defensa para propiciar una última acción de portento físico del base estadounidense que le dejó a Pietrus en bandeja un lanzamiento ganador desde los 6,75 metros. Pero el rebote de su errático tiro calló en las manos de Bellas. El base madrileño descargó entonces su rabia, le recordó a Cook el resultado del partido. Por sexta vez en las últimas siete visitas al CID el Valencia se iba de vacío y Cook, cabizbajo, tenía que escuchar la celebración del ‘Pío pío Palace’, que recibió la noticia de la quinta plaza al ritmo de fanfarria.

SAVANÉ CONVENCE A PIQUÉ
Piqué y Savané, sonrientes en el intercambio de camisetas.
(Foto: Archivo personal de Savané).
Savané lleva el fútbol en sus venas. Por eso viajó el martes a Barcelona y, tras el partido de la Champions, le entregó a Piqué un regalo fuera de lo común: una camiseta del Gran Canaria 2014 con su nombre en el dorsal. Ambos muestran en las redes sociales con orgullo la nueva amistad que ha nacido, tan distante y con tantas pocas cosas en común salvo el balón.

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