Sea oficial o amistoso, el derbi canario tiene su aquello siempre. Y ninguno de los contendientes quiere perderlo, ni de bromas. El primer asalto de este año acabó sin goles, pero hemos comprobado que fue un poquito más allá en el juego brusco, que no alcanza la calificación de violento ... pero casi. Siempre hubo chispas en estos partidos, convirtiéndolos en fuego real cuando se trata de una prueba más de la pretemporada. Y del 0-0 en el Heliodoro no iba a ser una excepción.
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| El roce en el Helidoro (TenerifeDeportivo.com) |
La pasada campaña Las Palmas salió perdiendo en el doble choque de máxima rivalidad, a pesar de ganarlo en las dos ocasiones dentro del nuevo formato de eliminatoria copera a al antiguo uso. La lesión por codazo de Diego Herner fue una factura alta y acto que no se llegó a comprender.
El primer derbi de 2012, sin embargo, lo olvidaremos pronto de nuestra memoria porque no nos dejó nada de relevancia salvo las gradas desiertas del Heliodoro, las ocasiones malogradas por Las Palmas que tuvo mejor trato de balón que su oponente y las sensaciones positivas que transmiten los nuevos fichajes amarillos. El siguiente derbi del Gran Canaria, en cambio, se convierte en una cita de confirmación que bien servirá para echar el telón a esta pretemporada que parece eterna. Tan interesante como el resultado del partido será comprobar que las gradas del Estadio de Gran Canaria están más vivas que las de su hermano deportivo. Eso también se interpreta como una victoria en el clásico, aunque por un tiempo será con carácter extraoficial.
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