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domingo, 25 de noviembre de 2012

NO POR VALDEBEBAS

En cuatro de los seis últimos partidos la UD Las Palmas dejó su portal intacto. No es casualidad. El equipo, en ese tramo, ha firmado una escalada espectacular desde la zona de castigo hasta las puertas de la promoción, convirtiéndose en el mejor de los 22 clubes de la Segunda División A. Dejó de ser una esponja su defensa y su fútbol acumula ahora más detalles acertados que lagunas o dudas. Tampoco es consecuencia del azar. El triunfo sobre el Córdoba -un excelente conjunto que mantiene el aroma de la pasada temporada- puede servir como botón de muestra de todos esos aspectos que se han ido puliendo desde Valdebebas; porque en este proyecto de Sergio Lobera hay un antes y un después a la visita al filial madridista. 
La montonera amarilla tras el 0-3 al Córdoba (C. Torres)
El después es el que gusta. En pocas semanas ha sido capaz de despertar la esperanza y todo comenzó por protegerse como lo hacen los buenos conjuntos de la categoría: orden, rigor y contundencia. Añadimos solidaridad. Ese principio preside la actuación del equipo en seis semanas mágicas donde ha logrado modificar a tiempo, antes de que el fútbol devorase todos los fundamentos de la nueva propuesta.
Los resultados están a la vista; también el rostro del equipo. En las caras de los jugadores se percibe algo distinto. Tampoco es casualidad. Están convencidos y corrigen los momentos desleales a la propuesta. Aún queda mucho camino pero este tramo de seis jornadas no puede caer en el vacío. Será difícil repetirlo, pero merece tenerlo como referencia porque por aquí se va a la Primera División. Por Valdebebas, no.

lunes, 19 de noviembre de 2012

LOS ATAJOS DE GUERRERO

Javi Guerrero no es rápido, potente, alto o especialmente virtuoso con el juguete que le sirve como herramienta en su profesión.  Pero conoce todos los callejones de los campos de fútbol, sus rincones y atajos. No es veloz pero tiene la habilidad de gastar el combustible justo para llegar muchas veces antes que un defensa, el hilo que marca la diferencia entre un éxito o una frustración. Su disparo no nos recuerda a Scotta o Zalazar, pero lleva un veneno con denominación de origen e impredecibles trayectorias difíciles de adivinar para los receptores con guantes. El remate de cabeza tampoco le caracteriza; sin embargo hasta el momento ha firmado tres de los cinco tantos con la testa que acumula la UD Las Palmas en la temporada que perdió a un especialista consumado como Mauro Quiroga. Tampoco el madrileño es un reflejo de Maradona, pero hace diabluras con el balón porque su cuerpecito siempre está en función del mejor provecho en un juego de habilidades como es el fútbol.
El abrazo a Javi Guerrero tras el 1-0 al Xerez (C. Torres)
Así se explica quizá que a los 36 años, con tanto kilometraje recorrido como tiene en el balompié español, Guerrero pueda parecer un joven incipiente, imposible de controlar y emocionado el sábado al firmar la que es su mejor racha realizadora como deportista en la Liga Profesional: cinco partidos consecutivos, otros cinco tantos. Porque otra de las cosas que definen al Javi Guerrero de la Unión Deportiva es que no es un goleador al uso, sino fina lluvia que empapa a lo largo de la temporada.
La orgullosa afición de la UD Las Palmas, que siempre saborea los productos propios y respeta las ayudas externas, viene premiándole esta campaña con ovaciones que en primer lugar fueron reproches. Pero Guerrero ha convencido con su labor silenciosa, efectiva y justa. Hasta en eso conoce el camino más seguro. Es un icono profesional en el que quienes quieran llegar tan lejos deberían inspirarse. 
36 años no pesan, te hacen ligero, potente, ágil e inteligente.

sábado, 17 de noviembre de 2012

EL CONTAGIOSO THIEVY

Desde que llegó a la UD Las Palmas y demostró ese plus que le diferencia del resto de los humanos en su profesión, una pregunta brotó en el ambiente amarillo: ¿Cómo le ha dejado venir al RCD Espanyol con los problemas que se le aprecia en su zona de ataque?. La cuestión seguirá latente mientras Thievy acuda a cada uno de sus encuentros con la UD Las Palmas expresándose de manera insultante ante los defensas rivales, a los que deja en evidencia cuando se trata de recorrer unos metros en velocidad.
Thievy, un hombre feliz (C. Torres)
Estamos ante un jugador que es distinto al resto de los conocidos en esta categoría. Una fuerza de la naturaleza que le da sello de identidad al ataque amarillo de esta temporada. Sus características han servido, incluso, para que todo el entramado de juego cambiara en busca de una mejoría. Y cuando sea capaz de combinar velocidad y eficacia podrá convertirse en una de las joyas del fútbol francés porque lo que tiene Thievy es un don. Intentaremos ser moderados al analizar a este joven galo; pero seremos también generosos al convertirle en ídolo cuando se tercie la ocasión porque en todos los proyectos colectivos lucen gestas individuales.
Seguiremos la sonrisa de Thievy, que es hoy por hoy un mensaje de alianza con la UD Las Palmas. "En Gran Canaria me tratan mejor que en Barcelona" dijo esta semana descubriendo algunas cartas. Es una frase con tremenda carga de profundidad. Cuentan que Thievy ha encontrado la felicidad en la islita y que no estaría dispuesto a desprenderse de ella, por encima de otros conceptos. Habrá que esperar muchas cosas ... pero si en el futuro ven en casa esa sonrisa es que la cosa pinta bonito.

martes, 13 de noviembre de 2012

DE UN HEMISFERIO A OTRO

Así es la Unión Deportiva; lo lleva en su ADN. Es capaz de ofrecer un rendimiento general distinto en pocas semanas. De ser un equipo al borde del caos, con un elevado promedio de goles en contra, apático y sin mordiente, de poner en el filo de un abismo a los gestores de un proyecto, ... pasa a desatar una euforia contenida, a convertirse en un equipo imperturbable para sus rivales y a fraguar alegrías que le cambian la cara a cualquiera. Ese viento actual es el correcto, con todo un colectivo en una sola dirección que pasa de un hemisferio a otro de la clasificación. Y empieza por donde reclamábamos: fabricar una coraza para no sufrir más contratiempos.
Nauzet Alemán (C. Torres)
Dijo una frase el pasado fin de semana Javi Guerrero que descubre las razones internas del por qué pudo producirse este cambio: "El míster supo corregir a tiempo", dijo. Y ha convencido a sus jugadores, que ahora están en el terreno de juego desplegándose cual ejército de laboriosos peones, anulando iniciativas rivales y cerrando partido a partido (hasta cuatro consecutivos a su favor).
El alma de la UD Las Palmas en el mes de noviembre se ha vuelto la de un equipo ganador. Ahora mira con ambición su inmediato calendario y éste le sitúa ante los seis puntos de oro consecutivos, ambos en el Estadio de Gran Canaria. Ganar al Xerez y al Córdoba merece un esfuerzo en la grada, merece borrar sinsabores y ponerse a soplar todos un poquito desde la tribuna, para que estos alisios no cesen.

martes, 6 de noviembre de 2012

LA PRIORIDAD: EFICACIA

Una de las razones por las que UD Las Palmas ha logrado reaccionar en el campeonato de Liga, levantando el vuelo cuando agonizaba el proyecto de Sergio Lobera, ha sido porque el propio entrenador y su equipo de colaboradores optaron por acoplar el sistema a las piezas que disponía para ello. Y no al contrario, con calzador. Incluso el juego es más productivo con los recursos empleados ahora; al fin y al cabo el espectáculo en el deporte profesional es ganar y, añadiríamos, "como sea".

Momo, en un regate ante Nano (C. Torres)
Llamó la atención que en la pasada jornada mantuviera el mismo modelo de juego por las alas (Sergio y Momo no participaban en sus carriles naturales) durante los noventa minutos del partido, a pesar de que la eficacia de ambos decayó de forma importante a la hora de construir. Y ya sabemos que todo es relativo, que depende de rivales, de la inspiración de cada jornada e, incluso, hasta de los baches que tenga el terreno de juego. De ahí que Sergio, una semana antes, realizara una jugada perfecta en la banda izquierda y colgara el balón con la zurda para que marcara de cabeza Guerrero. No hay dos días iguales en el fútbol, eso es evidente.

Para ante la Ponferradina, la eficacia de ambos para profundizar no pareció convincente. En especial cuando Momo se veía obligado en la banda de derecha a cambiar la dirección de sus conducciones para ingresar en el pelotón de la parcela más ancha. Renunciaba a correr en vertical para meterse en ese atasco que, en realidad, ya se pudo percibir en algunas de las jornadas en las que el ataque de Las Palmas fue previsible y poco profundo.

En cualquier caso, el partido de la Ponferradina está justamente salvado con el gol de Javi Guerrero. Y Lobera se ha caracterizado por ser un técnico reflexivo, que sabe mirar sus propios pasos para corregir la dirección del equipo. Si el camino es jugar con los extremos a pie cambiado, el ejemplo ante el conjunto berciano no parece válido como modelo a seguir.

lunes, 5 de noviembre de 2012

LOBERA ENSEÑA DIENTES

No pudo ocultarla. Rara vez hemos visto cambiar su estampa a Sergio Lobera en horas de trabajo; menos aún durante el primer mes y medio de competición cuando su almohada estaba cargada de preocupaciones. Pero este último domingo, después de relevar a Javi Guerrero por Chrisantus y de empezar a saborear el quinto triunfo oficial -tercero en Liga-, el técnico aragonés nos enseñó la versión jovial de su rostro, una sonrisa con la que compensa muchas horas delicadas, algunas de auténtica agonía profesional, pero también resume en ella el fruto de saber analizar y corregir sin abandonar la sensatez. No ha dado con todas las claves de la nueva UD Las Palmas, pero sí parece consolidarse el volantazo efectuado que cambia la dirección de su proyecto.
Sonríe y tiene motivos para ello, porque el equipo ha recuperado ese punto de agresividad y concentración defensiva necesarios para evitar los desajustes que le llevaban rumbo a la perdición. Sonríe también porque detecta que en el campo sus jugadores han recuperado la fe en el modelo 2012-13, con los retoques añadidos en las últimas semanas. Y sonríe, sin duda, porque un jugador al que pudo admirar en sus inicios en los banquillos le devolvió con un golazo ante la Ponferradina esa confianza que se ha ganado en silencio, partiendo como uno más.
Ver esas caras que transmiten felicidad otra vez en el banquillo y entre los jugadores es una señal digna de rescatar, porque transmite la sensación de que ellos saben que el objetivo quizá no es tan descabellado. Y aún hay muchos meses en el calendario para seguir sonriendo.