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domingo, 15 de diciembre de 2013

QUEMA HASTA EL BRAZALETE


Una de las escenas más confusas del encuentro disputado frente al Castilla se produjo a los 66 minutos cuando, con 0-2 ya en el marcador, Sergio Lobera decidió relevar a Vicente Gómez, aquella noche capitán de los amarillos por ausencia de los habituales. Los instantes que se vivieron en el momento de la salida del zurdo centrocampista nos sirven quizá como escaparate de lo que puede estar ocurriendo a la UD Las Palmas en este tramo lleno de baches del que no logra salir. Veteranos del equipo que estaban en el terreno de juego renuncian a coger el brazalete, que acaba en manos del debutante en la Liga, Leo, y éste pregunta a Asdrúbal. Y ante la incertidumbre del resto, ambos estuvieron al borde de asumir tal responsabilidad. Por fin Ángel López acaba siendo la extensión en el campo del cuerpo técnico tras unos minutos de absoluta perplejidad.
Ese detalle del brazalete no dibuja con exactitud el problema que puede estar padeciendo por dentro la UD Las Palmas, ni lo pretendemos. Pero la respuesta colectiva tan titubeante corre paralela al desarrollo del partido que los mismos protagonistas ofrecieron este fin de semana, ... y en las fechas que precedieron. El 'caso brazalete' no deja de ser anecdótico, aunque creamos que los conjuntos deportivos tienen siempre mecanizados todos los episodios posibles de un encuentro. Incluso el relevo del capitán, que era el primero en no saber qué hacer.
Todo ello sucede antes de que Sergio Lobera expresara que lo que le está ocurriendo al equipo está en la cabeza de los propios futbolistas. Peligrosa conclusión incluso para el propio emisor del mensaje. Un equipo bloqueado a nivel colectivo e individual acaba por señalar responsabilidades, con el peaje tradicional que no es capaz de eludir consejo de administración alguno, porque escucha de manera creciente la opinión que va adquiriendo la mayoría de sus aficionados. Esa invisible ley está ahí y tarde o temprano se aplicará, como siempre ha ocurrido.
Apenas unas horas después, el fin de semana nos muestra un escenario antagónico y con otro entrenador hablando de la mentalidad de sus jugadores. Era un análisis que puede servir a colegas de profesión para entender las procesiones internas del deporte. Es Pedro Martínez y su ensalzamiento a la valentía de aquellos jugadores del Gran Canaria para lanzar a pesar de la igualdad en el marcador y la presión del momento. El técnico concretaba su exposición recordando que la labor de los jugadores deprimidos dañan el rendimiento de los equipos. "Si juegas pensando en lo que has hecho mal antes, fallarás más", dijo.
No sabemos aún si la UD Las Palmas ha sido capaz de tocar fondo en cuatro partidos, pues de increíble manera pasa de aspirar a ser líder de la Segunda División a estar descolgada del play off en el noveno puesto. El candidato grancanario sigue con sus dudas, con la mejor plantilla pero sin hacer equipo. Y en una secuencia tan negativa como la actual quema todo, hasta el brazalete.

lunes, 25 de noviembre de 2013

APOÑO Y LA PÓCIMA DEL SILENCIO


Un presidente de la UD Las Palmas que la historia recordará por su elegancia en el trato fue Germán Suárez, gentil siempre entre conocidos y extraños. No se le recuerda palabra más alta que otra, ni gesto que no dibujara su hidalguía en todos los escenarios que pisaba, tanto en los profesionales como en los deportivos. Al fútbol iba con su puro, habitual compañero, para disfrutar. Y fue presidente del club grancanario por aquel argumento de las rotaciones aplicadas entre los miembros de la cúpula Gerencia Deportiva; sistema que, como se comprenderá, tampoco es exclusivo en las decisiones Sergio Lobera. Pero el fútbol y la competición tiene 'un no sé qué' capaz de crear en cualquier humano momentos de perplejidad, inhabituales. Suárez, en una única ocasión, rompió su estilo para calificar como "peor que una mosca cojonera" la actitud que había padecido en el palco del Insular por parte María Teresa Rivera, su colega del Rayo, en un partido de Liga de Segunda. Por un día y en un instante, el fútbol transformó uno de sus conceptos. No volvió a repetirse por más situaciones incómodas que hubiese vivido.

Apoño debe saber que tener reacciones como las que él mismo protagonizó el pasado sábado en el Miniestadio no es exclusividad suya; le ha podido pasar a jugadores con todo tipo de rangos y en circunstancias especiales. Debe saberlo, pero conocerlo no puede convertirse en su refugio. Ha hecho este lunes lo correcto: pedir perdón a aficionados y compañeros e intentar aclarar qué pasó en aquel instante fatídico ante el Barça B. Pero ahora viene lo peor de todo el entramado y es la resolución que adopte el Comité de Competición para definir si "sinvergüenza cinco veces" -lo que figura en el acta es la Biblia- es considerado insulto y en qué grado. Hasta diez partidos de sanción amenazan; un exceso sin duda.

Hay otra realidad que vive parelela en él: el Apoño que realmente interesa suma 23 puntos cosechados con la UD Las Palmas y 0 durante sus dos ausencias. Lo quiere él mismo dejar en curiosidad estadística, pero hay algo más detrás de este dato. No es casual. El Apoño perjudicado a título personal por lo que vendrá desde Competición también lesiona de manera directa al propio colectivo. Y no sólo por las circunstancias venideras, sino porque el escenario de una expulsión merma de forma directa a la UD Las Palmas en los encuentros. Esta vez, no hubo consecuencias porque el 1-2 fue inamovible. Pero él mismo lo subrayó este lunes: "Nos estamos jugando muchísimo".

Está claro que, en muchos aspectos, el malagueño es el nuevo Samways de la UD Las Palmas. Un jugador dotado de fuerte carácter, que acompaña sus actuaciones con correctas lecturas del juego e inyección de ánimo a sus compañeros, a los que logra espolear. Ese Apoño es el que fichó la UD, a quien este proyecto de ascenso necesita. Ha de imponerse sobre el otro, convenciéndole de que "las palabras que son inequívocas en un affaire son las que no se pronuncian".

martes, 12 de noviembre de 2013

¿ROTACIÓN O MERITOCRACIA?


A nuestro juicio, el diccionario de la RAE no recoge con exactitud en qué se convierte el entrenador de un colectivo de fútbol o de cualquier modalidad deportiva. Debería añadir en el concepto general que acaba siendo a veces un padre espiritual del grupo y, siempre, un administrador de egos que han de unirse en pos de un objetivo. El técnico y su equipo de trabajo son gestores de una idea e impulsores anímicos de ella. Porque la teoría de su labor se realiza con muñecos pintados en una pizarra; la realidad, sin embargo, es el campo de batalla. Y ahí su influencia es condicional.

Nunca uno mejor que el del 92. Hay, entrenadores y entrenadores, ideas e ideas y todo tipo de jugadores. Pero no ha habido en la historia del deporte mundial un equipo como el que Estados Unidos fabricó en 1992 para recuperar la hegemonía olímpica de su deporte patrio: el baloncesto. Le correspondió a Chuck Daly ser el técnico jefe de coordinar aquella amalgama de fenomenales baloncestistas, extraordinarios en todas las facetas del juego y líderes en sus respectivos clubes; eran acróbatas, malabaristas, atletas, ... y, entre ellos, un ilusionista. Ese conjunto empleó doce partidos en Badalona para la reconquista del oro olímpico y Daly utilizó como herramienta de trabajo el mantener a los once magníficos la condición de números uno, de mejor entre los mejores, de imprescindibles e ídolos planetarios. A todos, salvo el caso excepcional del novato universitario Christian Laettner, el duodécimo invitado que aún no se sabe cuál era su rol en aquel Dream Team.

Daly hizo todo tipo de concesiones y fue el entrenador que mejor ha sabido usar las rotaciones para mantener la llama del mejor equipo de todos los tiempos. Actuaba con ventaja con respecto a sus colegas: Podría formar cualquier combinación de quintetos con resultados impecables. Daba igual que Magic Johnson funcionara como base, escolta, alero o pivot; que Jordan diera la asistencia a Drexler o viceversa. Que jugara Mullin, Bird, Pippen, Malone o Barkley. Se divertían y dominaban con amplitud frente a defensas zonales, mixtas e individuales. Que unos fueran iniciales y otros reservas en las salidas de pista o al término de los partidos. Porque, además, el baloncesto consiste precisamente en rotar, variar cuantas veces quisiera por decisión del técnico. Bajaron los del Dream Team de una galaxia para deleitar a los humanos que fueron a verles. Consiguieron todos sus objetivos; también el entrenador.

Circunstancias excepcionales. Aquellos egos siempre recibieron sobredosis afectiva por parte del jefe del banquillo; sin fisuras. Chuck Daly, que había llevado antes a Detroit Pistons a la gloria NBA, había alcanzado una cima superior sin apenas romperse la cabeza. Fue, en realidad, juez de paz y aún así hubo de equilibrar protagonismos midiendo bien cada centímetro en el parqué de sus actores. Y soportar algún ataque de otras estrellas de idéntico nivel que no recibieron el beneficio de la elección para estar en el grupo. Sin embargo, no fue capaz aquel equipo de ensueño de levantar debate alguno. Sus circunstancias fueron tan excepcionales como lo eran los propios protagonistas.
Pero, ¿el concepto rotación está al alcance de todos los colectivos?. Esa palabra la ha puesto en práctica aquí mismo hace unas semanas Sergio Lobera. Se refiere a la combinación de tres elementos unidos de dos en dos, que es la probeta de tal medida; aunque por inercia esa actuación genera expectativas en las demás posiciones titulares en la UD Las Palmas. Porque se produce en un equipo donde, en quince encuentros, no se han enlazado dos formaciones titulares consecutivas.

Estamos ante un creciente debate que alimenta dentro y fuera resultados como los del pasado fin de semana en Alicante: ¿qué es mejor en el fútbol, la rotación o la meritocracia?. En cualquier caso, la aplicación de ambos conceptos es subjetiva, porque depende en exclusiva de las valoraciones del entrenador. Lobera no es Daly, Las Palmas no es el Dream Team ni el fútbol ofrece la posibilidad de rotar piezas en una misma batalla con tanta carta blanca como lo hace el baloncesto.

Una espoleta. La rotación, aplicada así, ofrece una tendencia al descontento de más de uno. Cuestiona el mismo concepto de la competencia entre los profesionales. Es una espoleta fuera; posiblemente también en el seno del colectivo. Porque las expectativas de otros jugadores en órbita se amplían, también la seguridad de los que esperan ser rotados al banquillo. Y, en suma, correría el riesgo de sufrir temblores la verticalidad de las decisiones del propio entrenador. La rotación en un deporte donde sólo once son protagonistas, donde tres más pueden acceder al escenario de forma parcial y otros siete no tienen un papel, es un concepto que tiene muchas aristas para mantener compacto el grupo con tantos y tan poderosos egos.

También el diccionario debería matizar la definición sobre un equipo de fútbol en general: una alineación que se recita de memoria, un banquillo con siete en estado de alerta y un grupo de 'enfadados' viendo el partido tras la barrera.

La frase sencilla de Sergio Kresic, aplicada en grado extremo, encuentra a nuestro juicio una puerta de salida en cinco palabras: "Los domingos juegan los mejores".

lunes, 7 de octubre de 2013

MÁLAGA CONNECTION


Habló Sergio Lobera en vísperas al encuentro del sábado frente al Córdoba que localizaba varias razones para entender por qué Las Palmas mantenía una regularidad en los dos primeros de competición oficial. Entre ellas, el hecho de que algunos de los jugadores "están aún en pretemporada", dijo en dirección a los últimos fichajes. Ellos, Aranda y Apoño, son sin embargo los que le han pintado la cara a la UD Las Palmas en el mes de septiembre, desde el arribo al proyecto junto al iraní Masoud.

El trío debutó en Copa el 11 de septiembre frente al Sabadell (1-3) y con la sociedad malagueña Apoño-Aranda en el campo todavía la UD Las Palmas no conoce otro signo que la victoria. Porque también fueron partícipes conjuntamente del 1-0 al Jaén y del 2-0 al Córdoba. Además, Apoño también fue pieza angular en el 0-2 en Girona. En su caso, cuatro encuentros, cuatro victorias. Masoud, en cambio, ha participado todos los minutos desde su llegada a la isla por lo que también vivió en sus carnes la debacle de Lugo (3-0).

La conexión malagueña en el equipo grancanario ha dado sus frutos en grado máximo. Se ha analizado en abundancia la personalidad de Apoño, sus dotes de mando en el campo, la personalidad que imprime al resto del equipo. Con Aranda en el terreno de juego, Las Palmas también modifica su estilo. El ariete andaluz altera los conceptos generales del equipo en relación a la pasada temporada cuando Thievy, el delantero más avanzado, entendía el fútbol en vertical. Aranda lo hace muchas veces jugando de espaldas a los defensas, porque tiene la virtud de proteger el cuero con su cuerpo y distribuirlo. El fútbol amarillo con él exige más combinación, menos rapidez en cambio para pisar el área.

Sin embargo, el 1-0 al Córdoba es una obra de relojería en la que intervino en combinación con Masoud. Bastaron tres contactos con el balón para desarmar al mejor equipo defensivo de la categoría hasta entonces. El esférico viajó treinta metros desde las botas del iraní, buscando al espacio libre. Aranda se mezcló entre los centrales Bernardo y Fran para crearle un instante de confusión. Contactó con la derecha primero y remató con la zurda.

La máxima se cumple porque la reacción, de momento, lleva la firma de Málaga Connection ... y de Masoud.

martes, 1 de octubre de 2013

UN CATÁLOGO DE HORRORES


Dos jornadas después de victorias consecutivas que iluminaron el camino y la UD rescata en Lugo el catálogo de horrores, aquel que hizo titubear sobre la trayectoria del actual proyecto. El equipo amarillo sufrió un naufragio en todos los aspectos del juego y resucitó peligrosos defectos, que le hicieron conocer la más dura derrota de la campaña:

Fragilidad defensiva. La descoordinación en la retaguardia fue nota común desde el inicio del partido. Pablo Sánchez penetró en el área a los cinco minutos y pudo ser objeto de penalti en la primera llegada del Lugo. Lejos de cerrar huecos, Las Palmas se desarboló ante el juego combinativo de los gallegos, con el mismo Sánchez en la jefatura de sus operaciones. Con robo y triangulaciones llegaron los dos primeros tantos, que sentenciaron con prontitud el partido. El tercero, para completar la gama de desaciertos, en una jugada de corner con doble remate del mismo protagonista.

Fracasa otra vez el doble pivote. Nombrar a Apoño en el pospartido es la peor señal. La ausencia del malagueño, que se había hecho un hueco en el once casi en solitario para abastecer el centro del campo, fue evidente. El doble pivote utilizado en otras jornadas volvió a fracasar. Lobera lo rompió en apenas media hora de imprecisiones, desbordados por la claridad de ideas del conjunto local. El sacrificado fue Javi Castellano.

Individualidades irreconocibles. Los jugadores importantes del equipo no ofrecieron lo mejor de sí en el encuentro. Valerón se perdió entre la multitud, sus pases no resultaron determinantes. Masoud coordinó alguna acción en los instantes finales pero sin continuidad. Mayor se perdió en la espesura defensiva del Lugo, mientras Asdrúbal se desgastó en una batalla perdida ante rivales siempre bien escalonados. Lo mejor de la UD llegó en los avances y centros de Xabi Castillo, pero sin remates. Los miembros del equipo, en general, no eran reconocible a título individual.

Frágil presión. Lobera manejó en sus declaraciones una de las claves. Dijo que no quería hablar exclusivamente de actitud como una de las causas de la derrota. No la justificó pero sí la enumeró entre los defectos apreciados en el partido. Sus jugadores parecieron no estar convencidos en la manera de atacar las iniciativas lucenses. La presión de los amarillos fue inconstante y débil. No tuvo capacidad de empezar sus jugadas a raíz de un robo, una de las llaves del éxito en la pasada temporada.

¿Qué hacer con el balón?. Es un argumento que se reitera. Cuando Las Palmas construía, el Lugo no tenía dificultad en edificar sus defensas sin sentir peligro. El balón en la posesión grancanaria transitaba con lentitud y sin profundidad. La acción que rompió la norma acabó en gol con pase profundo a Delev. El búlgaro arrancó en situación reglamentaria pero el gol fue anulado. Hasta en ese detalle la tarde estaba cargada de negatividad.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

UNA NUEVA UD TRAS EL 11s


Da la impresión que está en marcha un cambio de ciclo importante en la titularidad de la UD Las Palmas, quizá también en la estructura de su juego. Al analizar el partido de este miércoles en Sabadell, el diseñador del proyecto habla de "tiempo necesario para el rodaje", tras expresar que está complacido con los efectivos que complementan la que era su ya extensa nómina de profesionales. Al doble desplazamiento peninsular acudieron 26 futbolistas y en un sólo partido se produjeron cinco debuts (incluyendo la reaparición de Ángel López) que centran esta primera incursión de los últimos efectivos.

Apoño s el futbolista que más responsabilidades asumió en el ensayo general del 'nuevo amanecer' que la UD Las Palmas ofreció en Sabadell. Su posición fue como medio centro pleno, el hombre desde donde brota el pase inicial, ayudado de cerca por Vicente Gómez. En teoría, en el futuro deberá estar unos pasos más atrás que la otra piedra angular del proyecto, Valerón, con lo que aún está por descubrirse si la UD que ha nacer después del 11S tendrá una o dos piezas de ataque. Este miércoles lo hizo con Aranda y Mayor, más tarde con Tato como doble pieza de arietes. Nos vale como referencia pero en la variedad de sistemas empleados hay otras opciones.

Apoño es un nombre a seguir. Cogió el balón y lanzó dos libres directos peligrosos en la segunda parte. Es una señal del protagonismo que desea tener en el equipo; y no espera. El gol del 0-1 parte de un robo suyo y disparo rechazado por Nauzet. El malagueño dijo en su presentación que venía seducido por el proyecto del club. Y parece que va en firme su apuesta.

A Masoud al fin, le vimos sonreír. Marcó en una jugada de astucia (leyó dónde iba a despejar el defensa para interceptar el cuero), pero todavía no exhibió el iraní la totalidad de sus dotes técnicas y malabares que le hicieron fama en Pamplona. Tira de oficio, de conocer los atajos. Un buen comienzo, en suma. Aranda, en cambio, tuvo poca presencia en el partido quizá porque a nivel físico no logró imponerse a los zagueros del Sabadell. Es un jugador que está por ver, pero un Aranda convencido de sus cualidades y confianza en su juego es un delantero potente dentro de la Segunda División.

Los componentes del trío de refuerzos no fueron los únicos protagonistas del pase a la siguiente ronda. Es un alivio comprobar que cada vez que el meta Raúl Lizoain se pone los guantes, el aficionado tiene la impresión de que ayer mismo también pudo ser titular. No existe en él nervios, ni altibajos, y esta vez volvió a mostrar personalidad suficiente como para que Barbosa pueda dormir tranquilo porque hay relevo.

Pero hay en el partido de Sabadell dos protagonistas noveles que proceden de la cantera y que deben tener presencia en este análisis. De una parte Asdrúbal Padrón, ese delantero atrevido que ha dejado cualquier signo de timidez en los vestuarios del Anexo. Está valiente el grancanario, se atreve con defensas profesionales a los que reta durante noventa minutos. Su pelea vuelve a tener el premio del gol, que es el alimento para los atacantes. Y no baja la guardia.

Pero los 15 minutos de Leo Ramírez, el día de su estreno profesional, no tienen desperdicio. Salió al campo y refrescó espacios para el equipo. Sacó a pasear con soltura su notable pierna zurda y envió un par de pases a cuarenta metros, precisos; y se desenvolvió también como si no hubiese un tránsito real entre la Primera Regional y la Segunda División nacional. Tenemos Leo, también Asdrúbal y Raúl. Están dispuesto a inyectar su ilusión para que Las Palmas vuelva a volar después de este 11 de septiembre que debe servir como día bisagra de una temporada.

sábado, 7 de septiembre de 2013

EL TRÁNSITO DE ASPIRANTE A CANDIDATO


Lleva tanto tiempo la Unión Deportiva Las Palmas paseando sobre el alambre, mostrando sus habilidades administrativas por la tenaza económica que ejerce su pionera situación concursal, que verse ahora en 2013 con todo el gremio encorsetado por obligados límites salariales le ha permitido actuar en situación de ventaja en el mercado de futbolistas. No por su capacidad dineraria para captar las piezas que necesita, sino por su alta convicción como entidad en tiempos de crisis, que ya ha sido objeto de loa por parte de la propia Liga Profesional al situar al representativo grancanario como uno de los modelos de gestión a seguir.

Los jefes del consejo de administración del club han tenido incluso paciencia y, sobre todo, han escuchado en profundidad las opiniones del cuerpo técnico para analizar en curso la competición cómo está el equipo y conjuntar una de las mejores plantillas que se recuerdan en el club cuando actuó en la Segunda División. Quizá, a bote pronto, esta nómina de 2013-14 tenga algún paralelismo con aquella que en 1999-2000 se reunió para el proyecto que encabezaba Sergio Kresic o, quizá también, para la de 1996-97 cuando desembarcó en la entidad Gerencia Deportiva con un potencial económico brutal. Son imprecisas las comparaciones, sin duda, pero sí ilustrativas.

Lobera, que ha revisado hasta el fondo del caldero en Pío XII para dar el ok a la venida de los futbolistas contratados, tiene a su disposición primeras, segundas y terceras opciones por cada uno de los puestos titulares, con jugadores expertos en la alta competición y noveles por explotar que poseen prometedoras condiciones. Tiene un equipo con un poderío físico apreciable y con futbolistas de contrastado nivel técnico individual. Posee incluso jugadores que pueden ofrecer en el vestuario y en la cadena filial su propio magisterio, para que sean huellas a seguir y reciban el consejo que les pueda llevar muy lejos. Gente que serene el ánimo del colectivo y domine el ritmo del juego. Lo tiene prácticamente todo, incluso el abrigo de una afición que abrazó a cuerpo técnico y jugadores en el regreso de Almería, donde les dijeron "esperaremos por ustedes".

Las Palmas no se guardó nada para el invierno, porque el mercado estival le concedió todo tipo de oportunidades, inimaginables quizá un año atrás. La apuesta que ha realizado la comisión deportiva del club y el consejo de administración reuniendo esta temporada a 16 futbolistas de Primera (once de ellos con carácter internacional) en los tiempos que corren, convenciendo incluso al mito Valerón para que tenga la oportunidad de cerrar su extraordinario expediente profesional intentando el ascenso con su club materno, es para quitarse el sombrero. Por supuesto, no están todos los que se desearían porque al club le dolió desprenderse de las últimas ventas que salvaron sus complicadas temporadas precedentes. Pero los amarillos de hoy están ahí para que en cada uno de los campos de juego de Segunda donda acudan esta temporada tengan la impresión de que reciben a uno de los considerados "equipo a batir".

Con estos mimbres, añadidos al empuje que pueda complementar la fértil cantera, da para un gran cesto, incluso resistente en el tiempo. Y, como el mismo Lobera expresó, ahora la pelota de la responsabilidad pasa a su asiento de piloto. Porque la UD Las Palmas, con la prudencia que siempre hay que adoptar en este tipo de consideraciones, ha de expresar en el campo este tránsito de aspirante (anhela a lograr algo) a candidato (propuesto para un objetivo). Un equipazo está en ciernes, ahora toca conducirlo correctamente hacia una meta.

lunes, 26 de agosto de 2013

EL CAUDAL OFENSIVO DECRECE


La UD Las Palmas ha sido el séptimo equipo de la Segunda División A que más ha tardado en anotar su primer gol esta temporada en partido oficial de Liga. Necesitó 119 minutos para que el cuero traspasara la línea de una portería rival después de quedar en cero frente al Deportivo y marcar Chrisantus a los 29 minutos de juego en feudo del Alavés. El dato puede parecer anecdótico, pero se presenta como una aparente señal de alerta. Sólo empeoran a los amarillos en estas dos jornadas de Segunda el CD Lugo (127 minutos), la Ponferradina (136 minutos), Mallorca (145 minutos) y Alavés (171 minutos), mientras se quedan sin anotar Tenerife y Real Madrid Castilla.

El gol, la creación de ocasiones, es un primer problema porque no sólo es la baja producción realizadora, sino la sensación de que el equipo de Sergio Lobera, en plena metamorfosis de una campaña a otra, ha perdido consistencia en su sistema ofensivo. El caudal de juego en ataque no es abundante y la proporción de aciertos, en consecuencia, decrece. Los dos primeros partidos de Liga ratificaron algo que ya empezaba a preocupar en la pretemporada.


Las prestaciones parecieron mejorar este sábado en Mendizorroza con respecto al debut frente al Depor. El nigeriano Chrisantus, además, repite por segunda temporada consecutiva como primer realizador de la plantilla grancanaria. Y firma otro hecho llamado: el azar le coloca su primer gol a los 29 minutos de estar en el terreno de juego, como había ocurrido en 2012 cuando, en ese mismo paso del cronómetro, firmó el 0-1 ante el Racing en el Sardinero.

El grifo ofensivo del que quiere ser de nuevo candidato a la lucha por el ascenso está atascado o, de momento, se ha abierto en la medida que se esperaba. Para el ataque la UD Las Palmas ha reservado sus últimos esfuerzos en el mercado de jugadores, que ha resolverse en el sprint final de agosto y en el inicio de septiembre hasta el cierre del periodo de inscripción.

Maky es el superviviente en plantilla del tridente de los 38 tantos (recordemos: 12 el nigeriano, 15 Vitolo y 11 Thievy). Pero aún el engranaje de ataque, con sus respectivos refuerzos, se presentan como una incógnita en una campaña donde el equipo parece haber perdido la chispa en ataque que le caracterizó en la pasada Liga.

No es realmente un problema de la calidad de los rematadores, que aún está por comprobar las de Delev, Mayor, Tato y de los canteranos que están en la órbita del primer equipo. Las Palmas necesita recuperar su buen criterio para ganar metros y crear peligro, máxime ahora que dispone de un futbolista idoneo para el penúltimo o último pase.

El margen de mejora es, sin duda, muy alto. Y la comisión deportiva se obliga a buscar las soluciones ya con carácter inmediato para que todas las piezas estén en disposición del estratega. Las noticias han de concretarse de manera inminente.

lunes, 19 de agosto de 2013

LA ZANCADA DE MAYOR NO ES LA DE THIEVY

Una de las reconocidas virtudes de Sergio Lobera como profesional del fútbol es su análisis frío y sensato, capaz de realizarlo casi de inmediato al finalizar los encuentros. Si fuera cronista, dibujaría con mucho realismo lo acontecido en el campo de batalla. Quizá por ello la pasada temporada supo reconducir la trayectoria de la UD Las Palmas llevándola desde el fondo de la clasificación hacia arriba, incluso tocando las puertas de la gloria. En esa labor demostró saber extraer el mayor rendimiento posible a los recursos que tenía. A raíz del 0-1 de este pasado sábado frente al Deportivo le toca hacer lo propio para mejorar las prestaciones de una plantilla que ha sufrido una amplia remodelación, en especial en lo que a su vanguardia se refiere.

Hablar del pasado no focaliza la realidad del presente. Pero este sábado ante el Deportivo hubo detalles en el partido que pudieron rescatar al menos la preocupación. Lo mejor de la UD Las Palmas -prácticamente lo único potable- llegó en la primera media hora de juego. El equipo tomó posiciones en el campo, logró asfixiar parcialmente a su rival y desplegar un juego que, por momentos, guardaba semejanzas con fases del pasado ejercicio. Porque, con nuevos recursos para generar el caudal de pases profundos, se vieron algunas carreras verticales en la búsqueda del portero gallego Lux. La velocidad fue, precisamente, la característica principal del primer año de Lobera, que convirtió el juego de la UD casi en el fórmula uno de la Segunda División. Pero este sábado y ante un rival de empaque, esos balones verticales captados en especial por Mayor acabaron en nada. En realidad, el delantero debutante mostró que, para ese estilo futbolístico, no tiene las piernas de su antecesor, Thievy, o la potencia adicional que Chrisantus le pone a estas acciones. Mayor no logró la zancada necesaria para dejar atrás a su par y, en consecuencia, el peligro en las contras amarillas fue controlado por el Deportivo.

Las Palmas eligió mal el sábado el camino del gol. El concepto que había sobre Mayor y su aportación al proyecto no se le relacionaba con la misión de relevar a lo realizado por Thievy o, en su defecto, por el cualquier otra de las gacelas que tenía la veloz UD Las Palmas de apenas unos meses atrás. Quizá Delev, por supuesto Chrisantus, pero el estilo Mayor no correspondía a lo que se presenció en este primer asalto de la Liga.


A Tato, en cambio, le va la guerrilla. Su capacidad para combatir ante una multitud de adversarios está demostrada. Fue el hombre más peligroso en el partido del debut liguero, pero su arsenal se agotó cuando precisamente al equipo se le fundieron los plomos en el último cuarto de la primera parte. Fue preocupante la falta de ideas; peor la incapacidad para reaccionar tras el apagón.

Hubo detalles en el partido que merecen relevancia porque son apéndices potenciales que el equipo puede explotar. El juego combinativo de Valerón merece una correspondencia. Momo y Nauzet son futbolistas en teoría ideales para seguir sus extraordinarios pases. Asociarse a Valerón requiere una visión intuitiva de lo que puede ocurrir. Hay que entenderle porque en cualquier momento genera la jugada sorpresa, el último pase. El fútbol reside en él, está intacto; y además en el aspecto físico ha demostrado capacidad para dosificar los noventa minutos con lectura de veterano.


Además, mientras Atouba estuvo en el campo, Las Palmas cargó su juego por la izquierda, porque estaba entonado el camerunés, ofreciendo profundidad y buenos servicios. Está crecido, con confianza, dispuesto a ser una de las revelaciones de la Liga. No le queda a la zaga Aythami Álvarez, sin duda una noticia feliz su recuperación. El canterano ha recuperado la frescura física y, por momentos, buscó la aventura. Su relevo se produce en superioridad numérica de la UD y por una pieza idéntica, que no supuso cambiar la pintura del escenario, que era gris.

Todo lo demás por encima del minuto 32 del primer tiempo quedó ensombrecido porque la desaparición de Las Palmas fue absoluta. Donde acaba el partido comienza el trabajo de los técnicos ya que, de inmediato, el equipo ha de ver la luz y recuperar la coherencia. La Liga, una vez comienza, no concede tregua.

domingo, 11 de agosto de 2013

UNA UD ACORDEÓN PARA SER IMPREVISIBLE


Hay una palabra que podría describir el concepto prioritario con el que aún está en proceso de conversión la nueva UD Las Palmas: ser un conjunto imprevisible para los equipos rivales. La ha pronunciado con subrayado varias veces en el transcurso del verano Sergio Lobera. Casi se convierte en un reto técnico que, a escasos días para el inicio de la competición inicial, puede llevar a sus últimas consecuencias. Porque los espías que han podido estar en las islas tomando nota de la nueva idea grancanaria para 2013-14 no le van a proporcionar a Fernando Vázquez, entrenador del Deportivo de la Coruña, los datos exactos sobre la UD que les espera el sábado 17 de agosto en el Estadio de Gran Canaria.
La nueva UD modifica su estructura de juego y aún está por conocerse a fondo, incluso para quienes siguen a diario las evoluciones de esta puesta a punto. El choque amistoso frente al Atlético de Madrid ha podido ser el último banco de pruebas y en él Las Palmas mostró una idea acordeón en su dibujo sobre el terreno de juego, especialmente después de entrara para suplir a Valerón el búlgaro Spas Delev, quien hubo de asumir funciones en el juego que podrían ser impensables a primera vista: atacaba como pivote o trescuartista, defendía como ariete nato.
La actuación de Delev fue la más llamativa de cuantas se desarrollaron en el partido ante el vigente campeón de la Copa del Rey. Se precipitó su entrada por la lesión de Valerón, una posible baja que puede alterar parte del trabajo realizado en el estío. Al búlgaro le llegaron los primeros aplausos del Estadio de Gran Canaria; quizá a la afición le ha gustado su atrevimiento a mirar sin titubeos la portería adversaria, incluso desde la distancia. Esa idea inicial predominante sostenía un 4-1-3-2 sobre el terreno de juego, que podría transformarse en función de las necesidades. Este sábado, el cuarteto de zagueros sintió la cercanía de Javi Castellano, mientras la proyección de Nauzet Alemán y Momo sigue realizándose por las bandas diestra e izquierda respectivamente.A través de la combinación y de la posesión, que es otra de las máximas del ciclo de Lobera, ese diseño ofensivo pareció claro para la UD Las Palmas. Pero el equipo se transformaba con rapidez si el Atlético captaba el cuero y asumía la distribución de su ataque. Las Palmas modificaba de inmediato su estructura de vanguardia, retrasándose más metros que el búlgaro Delev los dos avanzados (Mayor y Tato), al igual que Nauzet y Momo. Todos ellos colaboraban en el cierre de espacios para el equipo rival y en el intento de recuperar el balón que ofreciera la posibilidad del contragolpe. Esto no se produjo en el partido, aunque parecía inminente en caso de algún robo a través de la presión.

Sin embargo, el partido contra el Atlético proporciona algunos datos reales sobre la UD Las Palmas que puede comenzar el campeonato con un bloque teórico. En él podría llamar la atención la novación habida en los dos laterales. De una parte, Aythami Álvarez se ha consolidado como pieza titular en las algunas alineaciones. La baja de Ángel López debido a su lesión de rodilla le confiere esa posibilidad para el ala derecha. En la izquierda, es Tim Atouba el hombre que acabó la pasada campaña en esta demarcación y que ahora podría iniciarla. "El lateral izquierda está bien cubierto", mencionó Lobera al referirse al trío que disputa el puesto, añadiendo en él a Dani Castellano y Xabi Castillo. Curioso es que uno de los puestos que más debates ha abierto en el club en las últimas temporadas tenga en la actualidad a tres hombres de reconocida solvencia.
Los extremos también tienen hasta el momento otro concepto diferente al de la pasada temporada: Momo es el puñal de la izquierda, Nauzet en la derecha. Pero no sería extraño que, en pos de esa imprevisibilidad, las piezas alteren las bandas como ya se ejercía la pasada temporada donde, en líneas generales, el resultado puede considerarse óptimo.
La UD llega a la última semana antes del inicio de la Liga como un equipo por descubrir, aunque con una sensación futbolística en general parecida a la que le dejó a las puertas del ascenso. Por descubrir, incluso, las últimas piezas del puzle de la plantilla cuya dirección deportiva espera tengan un protagonismo importante como lo ocurrido la pasada temporada con los futbolistas cedidos.

jueves, 25 de julio de 2013

38 GOLES EN EL MERCADO


15 de Vitolo, 12 de Chrisantus y 11 más de Thievy. Esa cifra de goles fue la que ayudó la pasada temporada a la UD Las Palmas a tentar el ascenso de categoría. Los de Vitolo volaron a Sevilla, mediante traspaso. Los de Thievy se quedan en Barcelona porque el Espanyol cuenta con su estilete galo. Y los de Maky están en el aire aunque en Pío XII no se descarta renuncia al delantero nigeriano, tentado por ofertas emergentes y un riesgo elevado de perderle el 30 de junio de 2014 sin recaudación porque termina contrato ... en teoría. Y una venta ahora es conseguir el objetivo de abrir rutas de viabilidad al club con sus peculiares características y obligaciones concursales.

Un serio dilema. A media que avanzan las jornadas con ocho de carga de trabajo, sin duda es la delantera del equipo la línea que más atención va a necesitar en la recta final de la confección de la plantilla. A los antes mencionados hay que reseñar la retirada de Javi Guerrero, otro hombre de garantías -intermitentes quizá- y la única aportación como refuerzo de Máyor. Tato renovado, puede también cumplir misiones de ariete.

Porque todos los inconvenientes hasta el momento se localizan en la zona de vanguardia. A los ya mentados hay que añadir que dos de los valores de la cantera llamados a estar en el grupo profesional optaron por marcharse: el juvenil Héctor Hernández, primero, lo hizo al Atlético de Madrid mediante traspaso y el goleador del filial, Cristian Herrera, decidió después afrontar un reto en el Elche.

Pero los 38 goles, al menos, los va a necesitar Las Palmas y por ello la varita mágica de la comisión deportiva ha de obrar otra vez. Si Maky se queda, será un alivio al margen de un interesante apunte ver cómo se comporta el águila nigeriana con un año de experiencia en España. Lobera está tranquilo, eso es al menos lo que ha expresado este fin de semana, porque de la chistera espera algo que debe haberle convencido.